Estado anterior del cuadro |
Después del Concilio Vaticano II, el altar fue desmantelado y el cuadro salió de la iglesia a un trastero. De aquí fue recogido por Pilar y Manolo que guardaron el lienzo doblado en su desván, pues el marco estaba en muy mal estado, hasta la llegada del párroco D. Antonio Barragán a quien se lo entregaron. Éste, tras ver el lamentable estado que presentaba, lo guardó en el desván de la casa parroquial.
Pasaron muchos años hasta que el anterior párroco, D. Juan Luis Carnerero, lo descubrió y lo llevó a la iglesia. Supo ver que era una obra de mérito y creyó que estando a la vista de todos se tomaría conciencia de que merecía la pena ser restaurado.
Transcurrido el tiempo, a través de Mati, se consiguió hablar con la restauradora Anabel Barrena para su reparación. Tras el fallecimiento de aquélla, en febrero del 2013, el contacto se retomó por mediación de su hijo Alberto.
Anabel Barrena se ofreció a restaurarlo sin coste alguno, por tratarse de una obra donada por familiares suyos, para disfrute de todos los feligreses de la parroquia.
Desde aquí, nuestro más sincero agradecimiento a Anabel Barrena por su generosa labor al haber devuelto el esplendor a esta maravillosa obra.
Proceso de restauración |
Proceso de restauración |
Proceso de restauración |
Lienzo restaurado |