30 nov 2018

VIGILANCIA DE ADVIENTO

Decálogo de la Vigilancia en Adviento de la mano de Benedicto XVI

¿Qué significa la llamada de la Palabra de Dios
y de la Liturgia a la vigilancia durante el Adviento?





1.- Justo desapego de los bienes terrenos.

2.- Sincero arrepentimiento de los propios errores.

3.- Humilde confianza en las manos de Dios nuestro Padre, tierno y misericordioso.

4.- Apertura a los signos de los tiempos y a saber descubrir y discernir los acontecimientos grandes y los hechos sencillos desde un corazón abierto a la Providencia.

5.- Gozosa, íntima y orante actitud de acogida, escucha y de la contemplación de la Palabra de Dios para ver la realidad, el mundo y el prójimo con ojos nuevos, vivir con esperanza fiable y actuar con caridad efectiva.

6.- La vigilancia cristiana es seguir al Señor, caminar hacia el encuentro con Cristo que está continuamente visitándonos.

7.- La vigilancia cristiana es elegir lo que El eligió.

8.- Es amar lo que El ha amado y ama.

9.- Es configurar la propia vida con la suya.

10.- Es recorrer cada minuto de nuestra vida y de nuestro tiempo en el horizonte de su amor sin dejarnos abatir por las dificultades pequeñas o grandes, cotidianas o extraordinarias.

22 nov 2018

TRIDUO EN HONOR A SANTA BÁRBARA

ACTOS EN HONOR A LA PATRONA DE OJUELOS ALTOS Y TITULAR DE LA PARROQUIA



Sábado 1 de diciembre: 18:00 horas, exposición del Santísimo, Triduo, santa misa y procesión.

Lunes 3 de diciembre 19:00 horas, exposición del Santísimo, rezo del Triduo y santa misa.

Martes 4 de diciembre 19:00 horas, santa misa solemne de Santa Bárbara.

20 nov 2018

SOLEMNIDAD DE CRISTO REY DEL UNIVERSO

<<Este último domingo del Año Litúrgico previo al inicio del Adviento, antes de la Navidad, celebramos la Solemnidad de Cristo Rey del Universo. En un adelanto de la segunda venida de Jesús, el Evangelio del Juicio Final es el examen con el que Jesús juzgará a todos los pueblos y naciones.

El Reino de Cristo es distinto a los reinos de los hombres legitimados por herencia o por conquistas en guerras y anexiones. El Reino de Cristo es un reino eterno y universal: reino de la verdad y la vida, de la santidad y la gracia, de la justicia, el amor y la paz. Un Reino que ya ha comenzado y va creciendo lentamente hasta que llegue el momento en que Cristo nos examine sobre cómo hemos respondido a su invitación a ser inquilinos de ese reino.
Jesús, con la majestuosidad y gloria del Hijo de Dios, reunirá a todos los pueblos de la tierra y pondrá las cartas sobre la mesa de su tribunal. No habrá tiempo para sobornos, disculpas, recomendaciones o privilegios: todos seremos iguales ante la Ley de Dios: la Ley del amor. El cuestionario propuesto por Jesús es bien concreto: “Tuve hambre, estaba sediento, fui inmigrante, estaba desnudo, enfermo o en la cárcel y me echasteis una mano”.
A la hora de responder todos se extrañarán y le dirán: “Señor, nunca te vimos pasar por nuestras calles o apostado en una esquina o en  el atrio de la Iglesia, nunca te vimos desembarcar en una patera o recluido en la cárcel o en el hospital. No te conocemos”. Jesús les aclarará todas las dudas: “Cuanto hicisteis a uno de los hermanos más pequeños, a Mí me lo hicisteis”. Y la sentencia será inapelable: "Venid, benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo”; y a los que no le reconocieron en los pobres y necesitados les dirá: "Apartaos de mí, malditos, id al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles”. Ya no hay dudas sobre dónde encontrar a Cristo: está a la vuelta de cualquier esquina de nuestra vida. No nos quebremos la cabeza, allí está Él. El Papa Francisco nos dice: “El otro, el pobre y desvalido, es la carne de Cristo”.>>
 D. Casto Ortega

2 nov 2018

CONMEMORACIÓN DE TODOS LOS FIELES DIFUNTOS

¡Qué alegría cuando me dijeron: "Vamos a la casa del Señor" (Salmo 121)

La muerte nos llegará a todos; pero para quienes creemos en el Señor como Camino, Verdad y Vida, la tristeza de la muerte se trueca en esperanza de ir al cielo.

Te pedimos, Señor, que nos concedas una muerte consciente, sabiendo que nos esperas al otro lado con los brazos abiertos. 

1 nov 2018

SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS

Éstos son los que buscan al Señor (Salmo 23)

Todos los santos del cielo son aquéllos que en esta vida recibieron los insultos, persecución y la calumnia con la misma serenidad que Jesús lo aceptó. Y pasaron por este mundo haciendo el bien, como Jesús lo hizo.


No puede juzgarse toda la existencia del hombre teniendo en cuenta sólo esta vida. Los santos fueron felices en la tierra, en medio de sufrimientos; y son plenamente bienaventurados en el cielo, sin temor a que esa felicidad eterna pueda ser arrebatada por alguien.