Un poco de historia:
Cuadro de Tomás Andrés Lorenzone a petición de Don Bosco |
El primero que llamó a la Virgen María con el título de Auxiliadora fue San Juan Crisóstomo, en Constantinopla en al año 345. También San Sabas en el año 532 habla de una imagen de la Virgen que era llamada Auxiliadora de los enfermos. San Juan Damasceno, santo sirio, fue el primero en propagar la jaculatoria "María Auxiliadora, rogad por nosotros" en el año 749.
Pero es en 1572 cuando el Papa San Pio V introdujo en las letanías de todo el mundo católico la advocación "María Auxiliadora, rogad, por nosotros".
Y es en 1814 cuando el el Papa Pío VII, prisionero del general Napoleón, prometió a la Virgen que el día que llegara a Roma en libertad lo declararía fiesta de María Auxiliadora. Inesperadamente el Pontífice quedó libre y llegó a Roma el 24 de mayo. Desde entonces quedó declarado el 24 de mayo como día de María Auxiliadora.
En 1862, Don Bosco convierte la opción mariana en definitiva: "La Virgen quiere que la honremos con el título de Auxiliadora: los tiempos que corren son tan aciagos que tenemos necesidad de que la Virgen nos ayude a conservar y a defender la fe cristiana", decía.